lunes, 29 de febrero de 2016

SALUDOS CON LA NARIZ DENTRO DEL IGLÚ

¡Qué frio ha hecho este fin de semana por todas partes! Al final no ha nevado en las calles y tejados de Miguel Esteban, pero ha hecho tanto frio que parecía nuestro pueblo el Polo Norte. Y si parecían el Polo Norte nuestro pueblo y nuestras calles, nosotros tendríamos que ser esquimales que viven rodeados de hielo y mucho fresquito. Pues aunque esto os parezca una locura, hoy en el cole hemos sido esquimales por momentos. Y nos lo hemos pasado...
 
Hoy os vamos a contar el día al revés; vamos a empezar por el final, aunque no sea así como se cuentan las historias y los cuentos, porque siempre se debe empezar por el principio. Pues al final del día, después de haber trabajado toda la mañana, nos lo hemos pasado bomba, haciendo dos juegos muy especiales. El profe nos ha puesto dos canciones muy graciosas y pegadizas: una habla del cinturón de seguridad en el coche y en el avión, y la otra es una canción de esquimales. Las hemos oído y cantado todos sentados en la alfombra, varias veces. Y después tocaba hacer un juego con cada una de esas canciones. El profe nos había avisado que haciendo los juegos de las canciones íbamos a remover la clase, e íbamos a liar una muy gorda. Y así ha sido, por suerte para nosotros. ¡Yuhuuuuuu!
 
Con el juego de la canción del cinturón de seguridad, hemos puesto todas las sillas en la alfombra, unas delante de las otras, y nos hemos sentado como si fuésemos montados en un coche. Hemos agarrado bien el volante, y nos hemos puesto, cómo no, el cinturón de seguridad. Y la canción lo decía así, a ponerse el cinturón, a tocar el pito, y a conducir con cuidado. Mientras cantábamos la canción hacíamos todo lo que decía. Ha sido muy divertido, porque también viajábamos en avión de repente; y es que en el avión también hay que ponerse el cinturón de seguridad. Mirad qué caras de velocidad tenemos algunos de nosotros...¡Jajajaja!


 
Pero el juego más divertido venía después, justito antes de irnos a casa. Así nos vamos con buen sabor de boca a comer a nuestros hogares. Era el juego que hemos hecho con la canción de los esquimales. Es una canción muy animada, que habla de la vida de los esquimales, dónde viven y cómo viven. Y sabemos que viven en casas muy peculiares y extrañas: los iglús. Son casas con el suelo con forma de círculo, y sus muros y techo están hechos de bloques de hielo. Y es increíble, pero dentro no tienen nada de frío. Pues nosotros nos hemos construido nuestro propio iglú para todos. Somos quince niños y niñas, entonces nuestro iglú tiene que ser grandote. Hemos puesto entre todos las sillas formando un círculo, como en corro, y nos hemos metido por un hueco que hemos dejado, para la puerta del iglú. Pero nos faltaba ponerle el techo a nuestra casita de esquimales. Pues qué mejor que unas cuantas colchonetas para taparnos las cabezas. Estábamos muy calentitos dentro de nuestro iglú, ahora entendemos a los esquimales. No pasan frio. Lo que pasa es que nosotros teníamos que estar muy agachaditos, sobre todo para salir uno a uno del iglú; hemos salido un rato todos los esquimales para pescar en el mar congelado. Hemos pescado peces frescos, frescos. Y tan frescos; el agua estaba llena de hielo.
 

 
 
La canción de los esquimales también decía que se saludaban unos a otros dándose un beso flotando las narices. Eso nos parece graciosísimo. Nos hemos saludado como podíamos dentro del iglú, con los compañeros esquimales que teníamos al lado, naricilla con naricilla.
 




 
Y vuelta al iglú después de una larga y dura jornada de pesca en los helados mares del Polo Norte.
 
Hubiésemos parecido más esquimales si nos hubiésemos puesto nuestros abrigos y capuchas, como las pieles y abrigos que llevan ellos. Pero nuestro iglú no daba para mucho espacio, y con los abrigos habríamos estado muy apretaditos. Ha estado muy divertida la última hora.
 
Hoy, como hemos tenido un fin de semana de por medio para hacer muchas cosas, traíamos varios compis dibujos y regalos para enseñar. Pero hemos tenido que esperar un rato, porque a primera hora teníamos Religión con Sole, y porque nos gusta enseñárselo todo al profe, y a él le gusta ver lo que traemos cada día. Hoy nos hemos hecho esta foto con Sole, para que la conozcáis. Es una maestra superbuena y le tenemos muuuuuucho cariño.
 
 
 
Cuando ha llegado el profe ha empezado el desfile de dibujos y regalitos a los compañeros. Ciprian, Dylan, Mara, Hugo, Sergio, Mariola, Lucía, Silvia... todos ellos nos han traído dibujos y sorpresas para la clase y algunos compañeros. ¡Hip, hip, hurra! Mirad qué gran exposición. Algunos dibujos ya están colocados en las paredes de nuestra clase, y otros se los han llevado a sus casas los compañeros a los que se los han regalado.
 




 
 
Hoy volvíamos a tener un montón de papeles y envases de plástico en nuestros minicontenedores. El escuadrón de limpieza de hoy ha sido un poco menos numeroso que el del otro día. Pero igual de efectivo. Hemos vuelto a llevar todos los residuos a los contenedores de reciclaje grandes que hay al lado del edificio de Primaria. Alonso y Ciprian, bien abrigados, que por ese patio corre mucho el viento, han sido los encargados de tirar el plástico y el papel. Un aplauso para ellos.
 
 
Y el día, entre unas cosas y otras, se nos ha pasado en un abrir y cerrar de ojos. Enseguida nos hemos ido a nuestros iglús... bueno no, a nuestras casas de ladrillo y cemento, a comer peces recién pescados... ejem, ejem, a comer la comida que nos han preparado nuestras familias. Ojalá que mañana hagamos de nuevo algo igual de especial y divertido como lo de hoy. Hasta mañana amigos y familias, a ver si nosotros pescamos algo esta tarde, ¡Pero que no sea un resfriado!
 
 
 
 

sábado, 27 de febrero de 2016

MANITAS Y DEDITOS NEGROS

¡Viernes! Día de recogida de babis, de tazas y pañitos. Día de fundas con la tarea para el fin de semana. Día de sesión de cine en la pizarra digital. Día de premio por una semana trabajando con ganas en el cole y por portarnos correctamente. Y hoy el profe nos dijo que nos daría una sorpresilla para llevarnos a casa. Nos llevaríamos todos a un personaje que lleva poco tiempo entre nosotros: el panadero P, bueno, el mini panadero P, y su gemelo; porque nos hemos llevado, metidos en la funda de la tarea, a dos panaderos P; y también a toda la familia real: rey U, reina A, princesita I, princesa O y príncipe E. Ya sabemos que teníamos en casa a toda la familia, pero nos los volvemos a llevar para jugar más y mejor con estas simpáticas letras. Así las combinaciones que hagamos con ellas, para formar e inventar palabras, son mayores. Porque si queremos construir la palabra "papá", necesitamos tener dos señores P y dos reinas A. Ahora ya lo podemos hacer.
 
Hoy, antes de salir al patio, hemos jugado todos, cada uno con sus personajes, a hacer palabras. El profe escribía una palabra en la pizarra y nosotros teníamos que colocar las letras correctamente para que se leyese bien. Ha escrito palabras como: "pipa", "pupa", "pie", "pio", "pía", "upa", "aupa", etc. Algunos de nosotros todavía nos liamos un pelín a la hora de colocar una letra delante o detrás para que se lea bien, pero no pasa nada, porque poco a poco lo iremos haciendo bien. Somos pequeños todavía y conforme vayamos haciéndonos mayorcitos lo haremos mejor. Hay que ir poco a poco, paso a paso, y con paciencia. Primero podemos jugar a formar las sílabas con el señor P, y decir cómo suena cada sílaba cuando se juntan dos letras. Después de eso podemos ir juntando dos sílabas y así formamos palabras, como "papá", "popa", etc. Y también nos podemos inventar palabras que no existan y leerlas para reírnos un rato.





A primera hora, en la asamblea, hemos estado casi media hora viendo los trabajos que habían traído muchos de nuestros compañeros. Cada vez traemos más y más cosas a la clase, para regalar, para decorar o para premiar a algún compi. Dylan nos ha traído un nuevo dibujo del Rey del Calor, que está supergracioso. Lo han hecho entre él y su mamá. Entre los reyes de Letrilandia y todos los reyes del cuento del frío y del calor, esto parece un palacio real. Mara también ha traído un dibujo doble, por un lado a Mickey Mouse, hecho por ella, que es otra artista, y por el otro lado al panadero P. ¡Bravo Mara! Yeray se ha presentado con un dibujo precioso y muy primaveral, de un árbol con un bonito jardín. Hugo también ha traído un dibujo de una casa muy bien construída, con la ayuda de su hermana Natalia; y Ciprian nos ha enseñado un dibujo de un barco enorme surcando los mares, que parecía de verdad y todo.



 
Y nos falta Silvia, que ha venido con un sobre lleno hasta los topes de cositas. Os debéis acordar de que Silvia fue ayer la responsable del Bingo de las letras, y tenía que darle un premio a cada uno de los ganadores. Tenía eso pendiente. Hoy traía en su sobre regalitos para Mariola, Varvara, Lucía y Miguel. No se le ha olvidado su responsabilidad. Y como le ha cogido el gusto a eso de jugar al minibingo de letras, hoy la partida que han jugado ha sido mayor. Apenas cabíamos en una mesa con nuestros cartones.
 
 
 

 
Después del patio, un poquito antes de la sesión de cine con los niños de Begoña, hemos hecho un trabajo de plástica que nunca habíamos hecho y con el que nos hemos manchado mucho los dedos. Hemos usado unas ceras especiales que nunca antes habíamos usado en el cole. Son ceras blandas, pero tan blandas que si apretábamos un poco se nos rompían entre los deditos. Hemos cogido todos la cera negra, que es, encima, la que más mancha. Parecía que habíamos estado descargando carbón de un vagón. Con esta cera negra teníamos que tapar una cartulina que estaba estampada de mil colores y formas. La hemos dejado negra total, como si se hubiese hecho de noche o lo hubiésemos puesto un manto negro para esconder el colorido. Justo después hemos hecho magia. Con los punzones hemos dibujado; ¡Sí, sí, dibujado, y no picado! Dibujábamos con los punzones como si fuesen rotuladores, y claro, como están muy puntiagudos, quitábamos la capa de cera negra que había encima, y aparecían como por arte de magia los colores que estaban debajo, deseando asomar la alegría de su colorido. Nos ha encantado dibujar de esta manera. Teníamos que dibujar casas, con las ventanas, la puerta, las tejas del tejado, el zócalo, el número de la puerta... Y otros hemos hecho otras cosas que nos gustaban más. Los resultados han sido muy chulos porque las líneas y curvas que trazábamos cambiaban de repente de color. Lo único malo de este trabajo es que pringa un montón por culpa de la cera blanda.
 





 
Después de hacer este trabajo tan entretenido nos hemos ido uno a uno a lavarnos las manos, sin mojarnos con los grifos, que si no nos podemos poner malitos si vamos muy húmedos, y además el profe nos regaña. Las manos iban muy negras, como las del Rey Baltasar, y nos costaba quitarnos el color.
 
Hoy hemos despedido a Patosa hasta el lunes, porque ella y Ciprian ya están perfectamente para viajar. La semana pasada estaban los dos malitos pero hoy se han reencontrado y se han ido juntos a la casa de Ciprian. Con lo buen dibujante que es Cipri, seguro que le hace un montón de dibujos a Patosa. Sólo faltaba la casa de Ciprian por visitar. 
 
 
 
Este fin de semana el tiempo se vuelve loco y un poco más frio. Puede ser que caiga nieve en Miguel Esteban. Patosa va a estar encantada, porque le va a recordar a su lugar de origen, el Polo Norte. ¡Qué contenta se va a poner Patosa con la nieve! Bueno, y nosotros también, porque vamos a poder jugar con las bolas de nieve y podemos hacer un muñeco. Estaremos pendientes por la ventanas de casa si cae algún copito de nieve.
 
 
 
 
 
¡Hasta la semana que vieneeeeee!

jueves, 25 de febrero de 2016

LOS PINGÜINOS DEL POLO SUR

Buenas días, buenas tardes o buenas noches a todos, según el momento en el que estéis leyendo nuestro blog del cole. Cualquier momento es bueno para desconectar un poco de lo que estáis haciendo y entreteneros leyendo y viendo todo lo que hacemos y lo que nos pasa en el cole del Dragón, día a día.
 
Hoy hemos llegado en el libro de fichas de Patosa, a las fichas del Polo Norte. Ya llevamos días viendo cositas sobre este lugar del mundo donde hace tantísimo frío. Descubrir estas pequeñas cosas nos ayuda a seguir aprendiendo otras cosas, sin darnos cuenta. Son cosas que nos llaman la atención, y que nos motivan a la hora de trabajar.
 
Como todos sabéis, nuestra mascota de la clase, Patosa, la foca marchosa, vino del mismísimo Polo Norte. Ese es su lugar de nacimiento. Nuestros lugares de nacimiento fueron los hospitales, y ella nació entre un iglú y un iceberg flotante. ¡Qué distintos son nuestros orígenes!

 
Mirad el paisaje del lugar donde vivió Patosa. Todo lleno de nieve. Silvia dice que aquí, en Miguel Esteban, donde nosotros vivimos, nunca nieva. Pero se equivoca, porque ha habido algunas ocasiones que sí que ha nevado en invierno, y ha llenado todas las calles y tejados de nieve, y el patio del cole también; tanto como para poder hacer un buen muñeco de nieve. Eso nos ha contado el profe, y que cuando pasó eso nosotros todavía no veníamos a este cole, porque éramos más pequeñajos. Ojalá que volviese a pasar, aunque sólo fuese por un día, para que pudiéramos disfrutar de la nieve como en el Polo Norte. El profe dice que si nieva en Miguel Esteban nos tenemos que conformar con un poquito, porque nunca va a haber tanta nieve como en el Polo Norte. Mirad la montaña de la foto cómo está tapada enterita por un manto de nieve pálida. ¡Qué bonito!
 
Ya hemos visto dónde está el Polo Norte en nuestra planeta. Aquí tenemos una bola del mundo. Muchos de nosotros la hemos conocido al ver la foto, porque en nuestras casas, o en casa de algún familiar, hemos visto una igualita. ¿Veis a Patosa arriba del todo, donde el continente se vuelve blanco? ¡Ahí está el Polo Norte! Nos pilla a un buen paseo desde nuestras casas. Si salimos ahora no creemos que volvamos para la cena.
 
Y justo debajo del planeta Tierra, en el Polo Sur, que también está helado y lleno de nieve, viven unos de nuestros animales favoritos. Son los graciosos pingüinos. Parece que van todos con el mismo uniforme, porque se ve a todos igualitos. Nos hace tanta gracia verles caminar que nos hemos levantado de la alfombra y nos hemos dado un par de vueltas a la clase andando como si fuésemos ellos. Lástima que no sepan volar, porque entonces ya serían la bomba.

 
Hemos tenido que dibujar a cuatro pingüinos igualitos que el pingüino del centro. A todos les faltaban sus plumas negras, a algunos los ojos, a otro el pico, a otro también las patas... Con paciencia y fijándonos bien, hemos completado todos como su hermano. En total hemos contado 5 pingüinos del Polo Sur.

 

 
 
 Seguimos viajando e investigando sobre el Polo Norte, y nos topamos con grandes montañas y caminos llenos de nieve. Es muy duro caminar entre la nieve, debemos ir bien abrigados para no coger frío y empezar a moquear. ¿Os habéis dado cuenta de que no hay ningún árbol ni ninguna planta que asomen sus ramas y hojas? Hace tanto frío que es muy difícil que crezcan flores y hierba en el suelo. Lo único que crece son chupones de hielo.

 
Y si nos diésemos un bañito en el mar del Polo Norte no duraríamos ni medio segundo dentro. Saldríamos saltando y chillando de lo fría que está ese agua. Si metemos el dedo gordo del pie se nos congelan hasta los pelos del cogote. Está tan fría que está hecha hielo, y flotando en ese agua hay un montón de bloques de hielo gigantes que se llaman icebergs. Los barcos que navegan por esas aguas tienen que tener mucho cuidado con los icebergs para no chocarse con ninguno. Están por todas partes. El profe nos ha contado lo que le pasó a un barco enorme, uno de los más grandes que existieron, que se llamaba Titanic, y que por un despiste del capitán y los marineros, chocó contra un enorme iceberg; se partió el casco del barco y el Titanic se hundió al fondo del mar. Así que cuidadito con los icebergs familia. Patosa, Picolina y sus amigos están navegando en barca por el mar del Polo Norte, pero como son muy ordenados, Picolina ha hecho magia y ha colocado los icebergs por la altura, del más alto al más bajo. Así los tienen bien controlados y no se chocan con ninguno. Muy listos nuestros amigos.
 
 
Y ahora llega el momento de contaros las sorpresas que nos han traído unos cuantos de nuestros compañeros. En la fila había un montón de dibujos y sobres asomando entre los abrigos y las mochilas. Más que ningún día. ¡Qué emoción!
 
Hugo, Dylan y Mara traían cada uno un dibujo distinto para adornar las paredes de nuestra clase, que cada vez parece menos una clase y más un álbum de cromos de dibujos animados ¡Jajajaja! Mariola también traía otro dibujo para poner en la pared; era una reina inventada por ella y su mamá: la Reina de las Niñas, y era una reina con una muñequita en la mano, la mar de moneta. Y Ciprian, que es una caja de sorpresas, ha venido con un sobre dedicado para Sergio; se lo ha regalado, y dentro Sergio se ha encontrado un dibujo chulísimo de una calle con un semáforo. ¡Nos encanta ver que nos hacemos todos regalos! ¿Lo pondrá Sergio en su frigorífico como hace el profe con los dibujos que le regalamos?
 


 
Es muy raro el día que nadie trae algo al cole para enseñar en la asamblea.
 
En la última hora de estar en clase, hemos tenido un ratito para jugar por los rincones. Cada uno en el que le tocaba. Pues Silvia, Mariola, Varvara, Lucía y Miguel se han ido a jugar al Bingo de letras. El profe ha puesto hoy un Bingo de letras en el rincón de los Puzles, para que juguemos nosotros solitos; pero claro, uno de nosotros tiene que ser el encargado de ir sacando las tarjetas de las letras, para que los demás las tachen con plastilina. Cuando eso lo hacíamos con el profe, el que cantaba bingo el primero, se llevaba un premio. Resulta que los cuatro compañeros que estaban jugando al Bingo han cantado bingo a la vez, y la encargada de darles el premio era Silvia. El profe le ha dicho que tiene que pensar esta tarde en casa algún premio para los cuatro. O un dibujo, o una pegatina, o algo que se le ocurra y se invente. Pero mañana les tiene que llevar los premios a la asamblea. ¿Qué será, será lo que Silvia traerá? Mañana tempranito lo sabremos.
 
El profe nos tiene preparada una sorpresa para mañana, para llevarnos a casa en la funda de la tarea... Hasta mañana...