¡Cucú! ¿Quién soy? ¿No lo adivináis? Bueeeeeeno, os voy a dar unas pistas a todos, a ver si así lo acertáis. Soy muy blanquita de piel, voy siempre muy abrigadita para no coger frío, mi ropa es de colores, y no tengo manos, tengo aletas, con las que aplaudo cuando algo me agrada. ¿Todavía no sabéis quién soy yo? La última pistilla; llegué al cole subida en una pompa de jabón mágica, hecha por el hada Popeta. ¡Claro! ¡Soy Patosa! ¡Vuestra amiga del cole!
Me he metido en vuestro blog del cole porque os estoy echando un montón de menos a todos. Con vosotros en el cole me lo paso genial, y aún más cuando me he ido los fines de semana a vuestras casas. Eso ya ha sido la repera. Tengo unas ganas locas de que volvamos todos al cole y nos veamos las caras. Así me contaréis lo que os han traído los Reyes Magos, porque como sois tan buenos seguro que os llenan de juguetes.
Este año 2015 ya está casi, casi terminando. ¡Qué pena! Pero bueno, el que viene, el 2016, seguro que es aún mejor, y me lo seguiré pasando igual de bien con todos vosotros. En el cole del dragón estoy genial, me siento como en casa. Y cuando he ido con vosotros a vuestras casas me he sentido como una reina. Me habéis atendido superbién. Todavía no me he ido a las casas de todos los niños, pero queda mucho tiempo para visitarlas. ¿Queréis ver y recordar dónde he estado de viaje este año? ¡Siiiiii, me encanta ponerme nostálgica y recordar mis viajes y visitas!
La primera casa que visité fue la de Silvia. Eso fue ya hace meses, cuando empezaba el cole. Silvia me llevó de compras, y nos volvimos locas mirando ropa y juguetes. Jugamos un montón en su casa, dónde conocí a sus papás y a su hermanito Gonzalo. Y también me llevaron de viaje a un pueblo que se llama Ocaña y allí conocí a los tíos y primas de Silvia. Fue un finde genial.
La siguiente semana me fui de la mano con Sergio, un niño muy mayor y responsable. Estaba segura que con él no me pasaría nada, porque me cuidaba mucho. Y como Sergio es amigo de Dylan, otro amigo nuestro, fuimos a su cumple a Jábola. Imaginaros lo bien que me lo pasé con tantos amigos. Ese domingo desayunamos churros para coger fuerzas porque por la tarde teníamos otro cumpleaños, el de nuestro amigo Yeray. De cumple en cumple y tiro porque me toca. ¡Yupiiiiii!
Siguieron pasando los días y seguí con mis visitas. Esta vez era a la casa de Hugo, y allí conocí a sus dos hermanas, Natalia y María Jesús. Estuve con los tres y jugamos a un sin fin de cosas. Y el domingo de nuevo me fui a conocer otro pueblo, Quintanar de la Orden, donde vive la abuelita de Hugo. Guardo un bonito recuerdo de esos días.
Y llegó Halloween, fiesta que me encanta. Me tocó irme de la mano con mi amigo David, que también le encanta esa fiesta. Nos disfrazamos para la ocasión y fuimos pidiendo chuches con el "truco o trato". Me asusté un poco con el fantasma que tenía David escondido, pero luego lo vi a él y se me pasó. David es más valiente que yo, menos mal. Conocí el cementerio de Miguel Esteban, y llevamos unas bonitas flores para los familiares de David que están en el cielo. Gracias David por aquel fin de semana tan terrorífico y a la vez divertido.
Jaime estaba con muchas ganas de que me fuese con él, y al fin me tocó. Siempre me habla en el cole de sus tractores y yo ya estaba deseando verlos y jugar con ellos. También me prometió que nos iríamos de excursión juntos, y me llevó a la pradera de San Isidro, a ver los patos y a disfrutar con un emocionante partido de fútbol. Al día siguiente tocó ir al parque ¡Cuántas cosas! Estaba agotada de pasármelo tan bien con Jaime. Pronto repetiré.
El fin de semana que me fui con Dylan dio para mucho. Sus papás fabricaron un librito donde cuentan todo lo que hicimos. Patosa y Dylan se llama el librito, menudo best-seller. Conocí a un montón de familia de Dylan y a su mascota Nemo. Gracias a Dylan conocí Toledo, una ciudad preciosa, donde no paramos ni un momento. ¡Qué cansancio! El día siguiente fue mas relajado, aunque también divertido: fuimos a un parque, construimos una nave espacial y comimos y dormimos juntos. Para darme las gracias por la visita Dylan, que es muy "apañao", me hizo un bonito dibujo. Salgo muy favorecida, ¿verdad?
El fin de semana siguiente me fui a la casa de mi querida Mariola. Me quiere un montón y yo a ella también. La acompañé al dentista. Me hicieron una revisión gratis de todos los dientes, y nos dijo que hay que lavarlos a diario. Desde entonces lo hago siempre. Tuvimos mala suerte porque la mamá de Mariola tenía la latosa varicela. Pero entre todos la acompañamos y la cuidamos. Queda pendiente visitarles una vez más, cuando todos estemos sanotes y podamos disfrutar. Muaaaak.
Lo que más me gusta hacer es salir de viaje y celebrar los cumpleaños de los demás. Cuando estuve con José me lo pasé muy bien en el cumple de su hermano mayor, Javier. Había niños de todas las edades; estuvo divertidísimo. Y me quedé fascinada con el baloncesto. Es un deporte espectacular que he descubierto gracias a José y su familia. La casa de José es muy acogedora y me he sentido como en casa. Un besito Joselito.
Y mi último viaje del año a casa de una amiguita del cole fue con Varvara. Fue poquito antes de que empezasen las navidades. Conocí a Alex, que es el hermano mayor de Varvara, y que también conoce al profe, pues fue al cole del dragón con él. Se nota que era Navidad casi porque me colocaron un bonito gorro de Papá Noel para hacernos una foto. Varvara es una gran anfitriona. Cariñosa y amable. Y con ella he dormido muy cómoda y calentita. Sólo de pensarlo me dan ganas de irme otra vez a su casa a dormir en su cama. Gracias familia Pop.
Como habéis visto no he parado de viajar este año. Normal que os eche tanto de menos, con lo bien que me lo paso con todos vosotros. No os preocupéis los niños con los que todavía no me he ido, porque en cuanto empiece de nuevo el cole, cojo mis cosas y sigo visitando familia tras familia. Os pienso conocer a todos y que vosotros me conozcáis a mí. Ahora me toca quedarme con el profe, que me han dicho que está un poquito triste porque se le ha ido al cielo una persona a la que quería un montón. Yo le animaré por vosotros en estos días de Navidad. Ya le he dicho que no se apene, porque ahora esa persona tan especial le va a acompañar en todo momento, y va a cuidar mucho de él. Desde el cielo le va a vigilar y atender, como ahora mismo os miran y vigilan a vosotros los Reyes Magos; que ya queda poco para que os visiten. Ya sabéis: a portarse muy requetebién. Un beso a todas las familias y que tengáis una buena entrada de año. Os echamos de menos a todos el profe y yo en estos días tan especiales. Ojalá estuvierais con él para animarle como todas las mañanas lo hacéis. ¡Feliz Navidad y Feliz 2016! ¡Nos vemos pronto!
