Hoy tenemos que empezar dando una noticia muy, muy triste... Nos parece que esta es la primera vez que os vamos a contar algo que no nos gustaría tener que contar, pero es importante que lo sepáis. Nuestro querido pez Nemo, a partir de ahora, va a tener que nadar y jugar solo en su pecera; la pobrecita pececita Dori se ha muerto. El miércoles, cuando entramos al cole por la mañana, nos la encontramos flotando en el agua. Ya nos avisó el profe que estos peces tan graciosos, a veces, aguantan muy poco. No sabemos qué le ha podido pasar. Pero lo que sí teníamos claro, es que la teníamos que despedir con todo nuestro cariño y dedicación.
Le hemos buscado una bonita cajita, que ha sido una caja de gomets. En ella hemos metido a Dori, y queríamos que se fuese al cielo de los pececitos con algún recuerdo de nuestra clase. Le hemos metido en la cajita una bolita de plastilina, media tiza blanca y una cera azul; cosas que normalmente usamos en clase, y que hemos tocado alguna vez todos.
Después hemos salido todos juntos al patio, un buen rato antes de que los demás niños de las otras clases saliesen. Así estábamos solitos y más tranquilos. Nos hemos dirigido al arenero para enterrar la cajita de Dori. Colocados en círculo, hemos hecho un agujero, hemos metido la caja, y hemos dicho unas palabras para Dori, de despedida: "Pececita de mi vida, que nadas tanto como yo; por eso te queremos tanto y te llevamos en el corazón." Luego, sólo nos quedaba tapar el agujero, y hacer una cruz con las piedras que había por allí. ¡Pobre Dori!
Lo peor de todo es que cuando hemos vuelto a salir nosotros al patio, los mayores de la clase de 5 años, ya la habían desenterrado y tirado por los aires. ¡Qué mal nos ha sentado que hagan eso con nuestra mascota!
Pero bueno, al final todo pasa, y nosotros seguimos muy contentos con nuestro pez Nemo. El día que pasó todo estaba muy triste, pero hoy ya lo hemos visto mucho más animado y nadando con más energía. Y eso a nosotros también nos alegra.
Las otras mascotas que tenemos en clase, y que ya conocéis, son los gusanos de seda. Estas mascotas son más tranquilitas que Nemo. Nuestros amigos David, Mariola, Sergio, Ciprian, Silvia, Mara y Miguel, ya han venido con sus cajas de zapatos para llevarse a sus casas unos poquitos gusanos. Ahora lo que tienen que hacer es alimentarlos bien. Si no encuentran hojas de morera, no pasa nada, porque dicen Sergio y José Enrique, que ellos se ocupan de traer hojas para todos. Lo más gracioso que ha pasado es que en la caja de Mariola, había una mariquita traviesa y juguetona, que se salía y se paseaba de mano en mano, por todo el corro de compañeros; ¡hacía unas cosquillas...!
Y como llevamos unos día geniales de primavera, con calorcito y muy buen tiempo, ahora en el patio apetece hacer un montón de cosas. Hoy, algunas de las chicas, tenían ganas de ser pintoras en el recreo, y el profe les ha dado permiso para sacarse unos rotuladores, unos folios, y unas carpetas que les sirviesen de apoyo. En un periquete han montado un taller de dibujo y pintura al aire libre.
Y mientras que otros compis jugaban al fútbol, otros al pilla-pilla y otros vete a saber a qué... Sergio y José se han puesto manos a la obra y han hecho un auténtico castillo en el arenero, con su foso y todo. Claro, como esta es la semana que nos vamos a visitar el castillo de Consuegra, pues estaban inspirados. Al profe le ha gustado tanto su obra, que les ha dicho que la próxima vez tienen su permiso para llenar el foso de agua. Seguro que más de uno se apunta a ese trabajo.
¡Ah! Y otra noticia muy importante ha sido que hemos asistido a un parto en mitad de la clase. ¡Siiii! Tenemos que deciros que el bebé está sano y salvo, porque los médicos y enfermeros eran muy buenos profesionales. Han cuidado a Lucía, que era la mamá embarazada, de maravilla. Esta foto es justo antes de empezar con las contracciones. El parto calculamos que ha podido durar... diez segundos. Visto y no visto. La mami no se ha enterado de nada. ¡Enhorabuena!
Menos mal que hemos acabado con una buena noticia, porque el comienzo de hoy ha sido algo triste. Es fácil encontrar buenas noticias y cosas agradables cualquier día en el cole con los amigos. En cualquier momento, en cualquier rincón, puede pasar algo divertidísimo y maravilloso. Mañana mismo vamos a vivir algo así, porque nos vamos de excursión todos juntos a ver un castillo de verdad. Pero eso será otro capítulo más de nuestra vida en el cole del dragón. Y seguro que vosotros os enteraréis bien de como nos irá, porque tened seguro que os lo contaremos.
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